La revista Cambio 16
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| Primer número de Cambio 16 disponible en nuestra hemeroteca (29 oct. 1973) |
Decía el catedrático de Historia Contemporánea Antonio Fernández García refiriéndose al s. XIX español que “para examinar una sociedad en proceso de modernización es necesario tener en cuenta una serie de criterios1” y enumeraba una serie de factores políticos (pluralidad política, elecciones periódicas), sociales (sanidad, educación, movilidad social y libertades personales), económicos (producción, consumo…), laborales (articulación en sindicatos y asunción de formas diversificadas de lucha sociolaborales) y se citaba expresamente además en un lugar destacado al “sistema informativo plural”.
Si pensamos en la España de los estertores del régimen franquista y aplicamos ese cuadro de análisis vemos como el país se encontraba, al igual que ocurrió un siglo antes, en un estado de retraso respecto a muchos de los países del continente pero en ningún caso se puede hablar de inmovilismo.
Es en ese contexto en el cuál nace Cambio 16. No lo hace por generación espontánea. La génesis de la publicación, su razón de ser y sus líneas de información tienen su propia explicación histórica como perfectamente ha analizado José María Díaz Dorronsoro2.
La aparición del semanario tuvo una figura central, Juan Tomás de Salas (1938-2000), alumno del Colegio del Pilar de Madrid (el mismo centro analizado por Jordi Évole el Salvados de octubre 2015), “joven airado con la dictadura”, fogueado en medios extranjeros y en España Económica, revista que, desde 1968, había seguido una línea editorial e informativa más contestaria y abiertamente proclive a la democracia.
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| Portada de Cambio 16 el 17 de noviembre de 1975 en vísperas de la muerte de Franco |
En enero de 1971 el ministro Sánchez Bella liquidaba España Económica y solo nueves meses después salía al mercado Cambio 16. “Dieciséis socios, 32 años de media. Gente diversa, de izquierda y derecha moderada, pero unidos por un objetivo común, la democracia, en una auténtica prefiguración del consenso constitucional”3.
El semanario supo buscar el equilibrio entre ser combativos y evitar problemas con las autoridades. Lo hizo bajo el escudo oficial de ser un semanario de economía y sociedad, tal y como rezaba su subtítulo, y desde un estilo informativo desenfadado que le permitió acercarse a un amplio nicho de lectores, distinguiéndose de otras publicaciones opositoras al régimen como Triunfo, Cuadernos para el Diálogo o Destino.
Su posición centralista, cuya única trinchera periodística puede decirse que era la democracia, hizo que recibiera acusaciones desde todos los extremos. Tanto de ser comunistas como de estar financiada por la inteligencia estadounidense o las multinacionales, hasta de ser “el órgano informativo de ETA4”
Los setenta fueron un éxito comercial y periodístico para Cambio 16 pero el comienzo de la década de los ochenta significa el primer momento de crisis de la publicación. La llegada de la democracia redujo el “interés en la información de política pura y dura5”. A ello se sumó la aparición de nuevas publicaciones periódicas diarias como El País, El Periódico de Catalunya o Diario 16 (del mismo grupo editorial que Cambio 16), que “hablaban de lo mismo, con el mismo enfoque y, además, de manera diaria6”. Tampoco ayudó a capear la crisis algunos proyectos editoriales del Grupo 16 (empresa de Cambio 16) o el apasionado apoyo de Diario 16 al Partido Reformista Democrático de Miquel Roca o Florentino Pérez, entre otros.
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| Reportaje de Televisión Española sobre Cambio 16. Pinche aquí para acceder |
La década siguiente se intentó un relanzamiento del semanario, manteniendo siempre su compromiso y apuesta clara por la democracia y las libertades pero al mismo tiempo adoptando “un modelo más impreciso y generalista7”. Como empresa, el grupo editorial llegó a publicar “una docena de revistas: de historia, de decoración, de coches, de gastronomía8” e incluso se abría una filial en Colombia (hoy independiente). Pero lo cierto es que la profunda crisis económica de Diario 16 fue arrastrando al resto de publicaciones y el semanario no llegó nunca a remontar el vuelo.
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| Número 2000 de Cambio 16 |
El universo digital supuso un nuevo reto al que costó encontrar solución9 y que “estuvo a punto de borrar de las librerías a la cabecera10”. Hoy Cambio 16 es una revista mensual, repensada y rediseñada para afrontar la actualidad desde otra óptica, “de la información al análisis y del análisis a la inteligencia y, ahora, hazte una opinión11”
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| Primera portada de la nueva etapa con Grupo EIG Multimedia |
La Biblioteca Pública Municipal de La Orotava cuenta en sus fondos con poco más del 80% del total de la serie, esto es, 1859 fascículos en formato papel de 2263 publicados y 47 en pdf de los 67 publicados en formato digital. La revista está almacenada en ochenta cajas definiclas din-A4, más tres CD para los números en formato digital.
Actualmente la Biblioteca sigue suscrita a Cambio 16. El último número recibido queda expuesto en el revistero de la Sala de Prensa, donde permanece hasta la recepción del siguiente. Los doce anteriores se ubican bajo la tapa del revistero y el resto se encuentra en el depósito principal de la hemeroteca. Todos los números pueden consultarse en sala y están disponibles para el préstamo a domicilio.
NOTAS
1. Fernández García, A. (1997). Atraso y modernización en la España liberal (1834-1900). En J. M. Jover Zamora (dir.), Historia de España Menéndez Pidal (vol. 23, pp. 11-48). Madrid: Espasa Calpe.
2. Díaz Dorronsoro, J. M. (2010). Los orígenes del semanario político Cambio 16 (1971-1974). Comunicación y Sociedad, vol. 23 (n. 2), p. 41-70. Está disponible en Youtube una entrevista concedida por Dorronsoro a Periodista Digital en la que se aborda este tema con motivo de la presentación de su libro Cambio 16. Madrid: Saber y Comuniación, 2012. Puede verla pinchando en el siguiente enlace https://goo.gl/wHjicj
3. Martínez, Borja (2012). El periodismo constituyente de Cambio 16. Leer, año 28 (n. 232), p. 30-31
4. El compromiso de la revista por la democracia ha incluido a lo largo de toda su existencia al País Vasco. En mayo de 2001 Gorka Landaburu (en ese entonces periodista de Cambio 16, hoy su director de relaciones institucionales y defensor del lector) recibió en su casa un paquete bomba de la banda terrorista que le provocó graves heridas en rostro, abdomen y manos.
5. Marín, I. (06 de febrero de 2016). El «cambio» de la prensa de papel. Recuperado de eldiario.es http://goo.gl/eob6hr
6. Martínez, Borja. Op. cit.
7. B.M: «José María Díaz Dorronsoro», en Leer, año 28 (n. 232), p. 32-33
8. Caballero, A. (2001). Treinta años de Cambio 16: la madre del cordero. Cambio 16, (n. 1566), p. 68-69
9. Desde n. 2121 (01 oct. 2012) hasta n. 2209 (ag. 2014) se combinó una edición digital semanal y una edición impresa mensual manteniéndose una única numeración para ambas.
10. Marín, I. Op. cit.
11. Íbid.
2. Díaz Dorronsoro, J. M. (2010). Los orígenes del semanario político Cambio 16 (1971-1974). Comunicación y Sociedad, vol. 23 (n. 2), p. 41-70. Está disponible en Youtube una entrevista concedida por Dorronsoro a Periodista Digital en la que se aborda este tema con motivo de la presentación de su libro Cambio 16. Madrid: Saber y Comuniación, 2012. Puede verla pinchando en el siguiente enlace https://goo.gl/wHjicj
3. Martínez, Borja (2012). El periodismo constituyente de Cambio 16. Leer, año 28 (n. 232), p. 30-31
4. El compromiso de la revista por la democracia ha incluido a lo largo de toda su existencia al País Vasco. En mayo de 2001 Gorka Landaburu (en ese entonces periodista de Cambio 16, hoy su director de relaciones institucionales y defensor del lector) recibió en su casa un paquete bomba de la banda terrorista que le provocó graves heridas en rostro, abdomen y manos.
5. Marín, I. (06 de febrero de 2016). El «cambio» de la prensa de papel. Recuperado de eldiario.es http://goo.gl/eob6hr
6. Martínez, Borja. Op. cit.
7. B.M: «José María Díaz Dorronsoro», en Leer, año 28 (n. 232), p. 32-33
8. Caballero, A. (2001). Treinta años de Cambio 16: la madre del cordero. Cambio 16, (n. 1566), p. 68-69
9. Desde n. 2121 (01 oct. 2012) hasta n. 2209 (ag. 2014) se combinó una edición digital semanal y una edición impresa mensual manteniéndose una única numeración para ambas.
10. Marín, I. Op. cit.
11. Íbid.
